sábado, 17 de febrero de 2024

Recordando a Papy Bisonó

Por Luichy Sánchez Peralta

[Ver en la publicación anterior la actualización de los dominicanos en entrenamientos de Grandes Ligas]

 

Lo que leerán a continuación es la secuencia de un amplio hilo que publiqué hoy en mi cuenta de “X” (antiguo Twitter). Veamos:

La mañana de este sábado me recibió con la infausta noticia del fallecimiento de Reynaldo -Papy- Bisonó, presidente ad-vitam de Águilas Cibaeñas, uno de los grandes ejecutivos del béisbol dominicano, exsenador de Santiago.

Hacer referencia a Papy Bisonó requiere de mucho espacio. Señalaré algunas cosas.

Cuando nace la Lidom en 1955, le correspondió a nuestro padre (Juan Sánchez Correa) ser presidente de las Águilas Cibaeñas en los primeros 4 campeonatos, es decir, hasta el 1958-59.

No hacía mucho que Bisonó había regresado de sus estudios universitarios en USA, cuando en 1957 fructificó en Santiago de los Caballeros un movimiento gestor proconstrucción de un estadio para béisbol profesional y del que él era uno de sus principales miembros.

Ese año, Papy organizó una actividad en la casa de sus padres, ubicada donde hoy está el recién inaugurado Hipermercado Olé (avenida Bartolomé Colón), con la presencia del jovencito Leonidas Rhadamés Trujillo, el hijo menor del dictador presidente Rafael Trujillo.

Desde allí, lograron contactar por la vía telefónica al denominado "Jefe", mediante la cual explicaron el deseo que tenía Santiago de poseer su estadio, el cual llevaría el nombre de su hijo menor y a quien declararían socio honorario de las Águilas Cibaeñas.

Para concretizar la petición, al "Jefe" le pusieron al teléfono al presidente de las Águilas, quien sería el constructor de la obra, el ingeniero Sánchez Correa. La orden fue dada de inmediato y en pocas horas se iniciaron los trabajos. Bisonó feliz por misión cumplida.

Debido a esos trabajos de construcción del estadio, el equipo de las Águilas Cibaeñas tuvo que mudarse a la capital durante el campeonato 1957-58, lo que provocó una petición de Sánchez Correa a Bisonó.

Como Sánchez Correa no hablaba inglés y los jugadores estadounidenses eran muchos, además del manager, le pidió a Papy (quien hablaba muy bien el inglés) que se trasladara a Santo Domingo durante el campeonato, para que llevara el día a día. Este episodio de 1957 marcó la entrada de Bisonó a las Águilas Cibaeñas.

Ese traslado del equipo hacia la capital resultó traumático, quedando en el sótano al concluir la serie regular, con un pobre registro de 20-31 (.392). Al año siguiente, en octubre de 1958, fue inaugurado el "Estadio Leonidas Rhadamés" (hoy Estadio Cibao).

Cada vez que hago referencia al nombre original de ese estadio hago referencia a que ese "Rhadamés" se escribía con la "h" en la primera sílaba, no como el Radhamés que conocemos tradicionalmente.

Cuando las Águilas Cibaeñas ganaron su primera corona en temporada otoño-invernal (1964-65), el presidente del equipo fue Papy Bisonó. Curiosamente, para el próximo campeonato se cumplirán 60 años.

Papy Bisonó fue el responsable de "arrebatarle" a los Tigres del Licey a Miguel Diloné, considerado por muchos el más excitante jugador en la historia de la Lidom, quien revolucionó el juego de velocidad en la pelota dominicana y quien más en vilo ponía a la oposición.

Era 1971. Diloné fue llevado a un torneo de béisbol amateur fuera del país, con Robertico Díaz de manager. Díaz trabajaba para Licey y Cardenales de San Luis. Al regreso, Díaz llevó a Diloné a firmar para Licey y lo firmó para los Cardenales.

De inmediato apareció el zorro de Papy Bisonó. Resulta que Diloné era menor de edad y junto a él firmó su padre. Sin embargo, Bisonó sabía que Diloné estaba bajo la tutela de su madre, no de su padre.

Bisonó hizo invalidar el contrato de Diloné con Licey y lo puso a firmar otro contrato con los Piratas de Pittsburgh, organización que tenía acuerdo con las Águilas. A MLB llegaron 2 contratos y Diloné fue declarado inelegible por el comisionado hasta una fecha determinada.

Cuando llegó esa fecha, Diloné y su madre firmaron para los Piratas, siendo asignado de inmediato a las Águilas. Así inicio la carrera de Diloné como jugador profesional. Ese acto de firma se llevó a cabo en el restaurante Pez Dorado de Santiago.

Foto de ese acto de firma la mantuvo Bisonó enmarcada en su oficina de Águilas Cibaeñas en el Estadio Cibao hasta la hora de su muerte. Ahí aparecen él, un ejecutivo de los Piratas, Diloné y su madre.

En 1983 surgió el conflicto de la ley de expansión que impuso a la Lidom a los equipos Azucareros del Este y Caimanes del Sur. El inmortal Tony Piña Cámpora hizo mención de ese episodio en su cuenta de “X”.

Papy Bisonó fue el hombre clave para resolver el conflicto generado por esa ley, declarada inconstitucional 22 años después (2005).

Resulta que los equipos Licey, Escogido, Águilas y Estrellas se resistían a la imposición de esos equipos, provocando que el presidente Salvador Jorge Blanco despojara mediante decreto a la Lidom de su personería jurídica y creó la figura de "Comisionado Nacional de Béisbol Profesional".

Jorge Blanco dio personería jurídica a una nueva liga y acudió a su íntimo amigo Papy Bisonó para que se convirtiera en el primer "Comisionado Nacional de Béisbol Profesional" y montara el campeonato 1983-84 con Azucareros, Caimanes y esos 4 nuevos equipos.

Afortunadamente, siendo un gran hombre de béisbol, fue Papy Bisonó el designado por Jorge Blanco. Bisonó sabía que dentro del mismo gobierno había personas con el interés de hacer desaparecer a Licey, Escogido, Águilas y Estrellas.

Bisonó también sabía que en esa nueva liga, en los nuevos equipos, había empresarios interesados en "pescar en río revuelto", por lo que la condición que le puso a Jorge Blanco para aceptar el cargo le fue aceptada.

Vale la pena hacer un paréntesis para resaltar que entre 1998 y 2018, Bisonó y yo compartimos la misma oficina, siendo yo una especie de "mano derecha" para él. Me contó muchas cosas.

Esa condición de Papy al presidente de la república la expongo tal como él me la contó: "Salvador, la ley especifica los nombres de los equipos, por lo que, si me dejas trabajar, te monto el campeonato como ordena la ley". Dicho y hecho, pese a fuertes presiones contrarias.

¿A qué se refería Papy? A que la ley ordenaba que, además de los equipos ya existentes (Licey, Escogido, Águilas y Estrellas), se creaban a Azucareros y Caimanes, no 4 equipos con nuevos nombres.

Yo no sé si los dueños de los 4 equipos tradicionales tienen idea de lo que les salvó Papy Bisonó, lo mismo de lo que les salvó Leonardo Matos Berrido cuando consiguió la sentencia de inconstitucionalidad de la ley de expansión.

Señores, me he extendido mucho y pudiera hacerlo más, pero sólo añado que Papy Bisonó murió debiendo ser inmortal del deporte dominicano, limitándome a reseñar parte de su vida en el béisbol profesional.

Entre los años 60 y 70 impulsó ligas infantiles, juveniles y del béisbol superior amateur de la provincia de Santiago. Y desde diversas funciones oficiales, hizo grandes aportes al deporte. Para mí también fue un padre. Paz a su alma.


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